Solo hace falta salir a la calle para darse cuenta de que cada vez más personas utilizan los cigarrillos electrónicos, o vapers, como una alternativa a los cigarros convencionales. No obstante, todavía surgen muchas dudas sobre la seguridad de estos dispositivos y los efectos que pueden tener a largo plazo sobre la salud.
De hecho, una nueva investigación, publicada en la revista iScience, mostró que el vapeo cambia la comunidad de bacterias en la boca, es decir, el microbioma oral, de una manera que supone un mayor riesgo de infección en comparación con las personas que fuman cigarros convencionales o que, directamente, no fuman.
Los cigarrillos electrónicos son populares entre los fumadores porque les ofrece la posibilidad de recibir un golpe de nicotina sin riesgos para la salud que sí tenían el tabaco, como el daño pulmonar y un mayor riesgo de cáncer.
Lo cierto es que los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) muestran que casi el 55% de los exfumadores y el 48% de los fumadores actuales han recurrido al vapeo. Sin embargo, estos cigarros electrónicos también se han vuelto muy populares entre personas que nunca han fumado, especialmente entre los que tienen edades comprendidas entre los 18 y 24 años.
Este aumento del vapeo, particularmente entre los jóvenes, ha suscitado preocupación, ya que no hay datos disponibles sobre los efectos que pueda tener en su salud.
BACTERIAS ORALES
La nueva investigación evaluó los efectos de estos componentes en la primera parte del cuerpo que alcanzan: la boca. Además de ser una ruta para que el aire ingrese en los pulmones, la boca también es una puerta de entrada para los microbios.
Tener microbios en la boca no tiene por qué ser necesariamente malo, ya que hay billones de bacterias que viven en el cuerpo, la piel, los intestinos… Y nos ayudan a combatir las infecciones a digerir los alimentos.
Sin embargo, en la boca, los cambios en la comunidad microbioma pueden contribuir a una enfermedad oral y, por eso, los investigadores se centraron en esta zona. Así, compararon el microbioma oral de tres grupos de personas: usuarios de cigarrillos electrónicos, fumadores de cigarrillos convencionales y no fumadores.
De esta forma, los científicos describieron las comunidades microbianas presentes en la saliva de 119 personas de los tres grupos, utilizando un tipo especializado de secuenciación genética. Y lo cierto es que encontraron cambios significativos en el microbioma oral de los vapers.
En comparación con los fumadores de cigarros y los no fumadores, los vapers tenían un mayor número de bacterias llamadas Porphyromonas y Veillonella, que tienen una asociación con la enfermedad de las encías y son un reflejo de la “salud periodontal comprometida”.
¿CUÁL ES EL VERDADERO RIESGO?
Los expertos han relacionado los cambios en el microbioma oral con enfermedades que van desde las caries y el mal aliento hasta la diabetes, las enfermedades cardíacas e, incluso, el cáncer.
Aunque este estudio no muestra que el vapeo pueda causar estas enfermedades, sí muestra que está asociado con cambios significativos en la comunidad bacteriana de la boca. Por tanto, al igual que fumar cigarrillos convencionales, el vapeo también aumenta el riesgo de infecciones orales.
No obstante, hay que recordar que algunos de estos hallazgos provienen de células que los científicos habían cultivado en condiciones controladas, por lo que no se comportan de la misma manera que las células del cuerpo humano. Por eso, se necesitan más estudios detallados.