Sonqo, que significa corazón en quechua, y así ha sido como lo han bautizado, es un dispositivo que recrea la función del corazón, sobretodo del ventrículo izquierdo, que es el más activo en el bombeo de la sangre, el corazón, late sobre 80 veces por minuto, unas 115 mil veces al día y 42 millones de veces al año.
Este simulador ha sido creado principalmente para medicina nuclear, y más concreto para detectar patologías cardíacas mediante una tomografía. Y de la misma forma que si fuese un paciente real, a sonqo se le inyecta un radioactivo y se lo introduce en un tomógrafo SPECT, luego se analizan las imágenes obtenidas. El estudio obtenido es bastante completo porque analiza el estado de la irrigación, la funcionalidad del órgano y la capacidad de bombeo.
De momento, el equipo de investigación sigue trabajando para mejorar en el y en la simulación de patologías de isquemia y necrosis. Ya que si consiguen que se parezca más a un corazón real se podrán obtener imágenes más realistas.
Fuente: universidad nacional de general Sarmiento. Argentina investiga, divulgación científica y noticias universitarias.