Según un informe publicado estos días, una excesiva cifra de niños en Inglaterra son admitidos en hospitales de salud mental innecesariamente.
La investigación realizada para el Comisionado de Niños para Inglaterra encontró que los niños a menudo no podían obtener el apoyo adecuado en la escuela y en la comunidad y eran derivados a la Unidad de Salud Mental, lo cual contribuía a que los niños terminaran en instituciones mentales, a veces durante meses o años.
Los niños con discapacidades de aprendizaje o autismo estaban siendo particularmente afectados por la gestión y derivación programada del sistema. La investigación muestra una clara necesidad de «concentrarse en la ruta seguida por los niños antes de que ingresen en un hospital», señala el informe, pero a menudo esto no está siendo tenido en cuenta.
No se está proporcionado el apoyo adecuado a los niños cuando están en la escuela y viviendo en comunidad, especialmente cuando llegan en estado crítico, contribuyendo a las admisiones inadecuadas en el hospital y a veces excesivamente prolongadas, con las consecuencias derivadas de esta mala praxis.
La revisión concluye entre otros datos, que había 250 niños identificados como discapacitados de aprendizaje o autismo en hospitales de salud mental en Inglaterra en febrero de 2019, en comparación con 110 en marzo de 2015. Todo ello debido a la falta de identificación de estos niños en el pasado.